4 may 2016

Matronatación

Esta es una de las actividades más bonitas y divertidas que hemos hecho con nuestro ranín. Desde que cumplió los 6 meses hemos ido todas las semanas a la piscina juntos y ¡hemos disfrutado como enanos!.
La matronatación es una forma lúdica y relajada de introducir y acostumbrar al bebé al medio acuático, de estimular su psicomotricidad, de establecer vínculos de confianza y apego con los padres, les sirve para socializar y todo a través del juego y el agua.
Las clases de matronatación duran media hora y tienen lugar en grupos muy reducidos en los que hay un monitor y cada bebé está con uno de los padres (o con los dos en algunas ocasiones). Las primeras clases son más para enseñar a los padres cómo coger y mover al bebé en el agua de modo que se le deje libertad de movimiento y se evite que trague agua.
He visto bebés a los que les gusta mucho el agua, pero también alguno que llora bastante en las clases (cas siempre bebés que se han iniciado más mayores). No todos se sienten igual de bien dentro del agua de inicio, pero al final todos se acostumbran y disfrutan.
La temperatura del agua es importante, tiene que estar calentita (unos 31ºC), y es importante duchar antes a los bebés con agua no muy caliente, un pelín fresquita, para que no les dé impresión entrar en la piscina.

Indumentaria para el baño
Muchos bebés van con bañadores tipo shorty (como un mono con cuello alto y manga corta); sus papás dicen que así están un poco más calentitos. Nosotros nunca los hemos probado así que no podemos opinar sobre ellos. Nuestro ranín va con un bañador de cuerpo entero un poquito amplio, para que no se le pegue demasiado al cuerpo con el pañal de agua.
El pañal es importante, porque puede haber fugas, y el problema no es tanto el pis como la caquita...
También tienen que llevar gorrito de natación.
Y por supuesto, un albornoz o capa para secarse, y zapatillas para la piscina (tipo crocs o chanclas, dependerá de la edad del bebé y sus preferencias) o calcetines especiales antideslizantes. 
Nuestro ranín desde el principio se sintió muy a gusto en el agua y es una de sus actividades favoritas. Y lo que más le gusta desde que anda es tirarse a la piscina desde el bordillo ella solita; nosotros estamos en el agua esperando para recogerla, no os asustéis ;) Ella cuenta uno, dos y tres y se tira; una de las primeras cosas que les enseñan es a perder el miedo a tirarse, y a darse la vuelta en el agua, para agarrarse después al bordillo. 
El verano pasado se pasaba todo el tiempo en la piscina saltando al agua y subiendo por el bordillo ella solita, una y otra vez, una y otra vez. Los otros papás alucinaban cuando veían a un moco tan pequeñajo que no sabia nadar tirarse solo al agua, sin manguitos, ni flotador, ni burbuja, ni miedo, ¡ni sacio!

Lo que más nos costó fue que se acostumbrase a tumbarse relajada boca arriba en el agua mientras la sujetábamos por debajo. No le gustaba demasiado eso de mirar al techo, pero por lo que nos contaba el monitor es bastante habitual.

A partir de los dos años, dos años y medio, están preparados para seguir la clase solitos con el monitor, sin la presencia de papá y mamá. Y les obedecen muchísimo más que a nosotros. Ya se sabe, donde hay confianza,...

Nosotros vamos a un centro que sigue el programa NADAR ES VIDA de la RFEN (Real Federación Española de Natación) y estamos muy contentos hasta donde conocemos (nivel nutria).
niveles natacion infantil Real federacion española de natacion RFEN
Niveles natación infantil RFEN
 
¿Te animas a probar la matronatación con tu bebé? ¿ya la practicas?


No hay comentarios :

Publicar un comentario