Sobre mi


Soy mamá de una preciosa niña, mi ranín, que aun no ha cumplido los tres añitos, y de otra que viene de camino, y a la que esperamos con mucha ilusión y expectación. 

De formación arquitecto (urbanista, para más detalle), y curiosa por naturaleza. Curiosa en el sentido de que tengo mil y una inquietudes e intereses, y me moriría si dejase de aprender cosas nuevas cada día.

Soy madrileña, aunque me considero ciudadana del mundo. Me encanta viajar y conocer personas de diferentes lugares y culturas; quizás de ahí venga mi afición por los idiomas. Hablo inglés y alemán (aparte de mi querido español). También he estudiado chino, japonés y francés, aunque mi nivel actual en esos tres idiomas no me daría para sobrevivir ni dos días seguidos sin recurrir a la lengua de los gestos.

También soy una gran aficionada al arte gráfico, las manualidades, la decoración, la cocina, las plantas y a montar muebles de Ikea: una DOITYOURSELFER.



EL ORIGEN DE ANANANADOS

Por circunstancias de la vida, en mi segundo embarazo me he tomado un kit kat profesional para poderlo disfrutar a tope y formarme en algo que no tiene nada que ver con el urbanismo, pero igualmente apasionante para mí: un máster en big data y analítica web.

Ha sido a raíz de realizar dicho máster como surgió la idea de crear Anananados.

Por una parte me serviría para poner en práctica algunas de las cosas que voy aprendiendo, y por otra doy rienda suelta a un deseo que llevaba rondándome hace tiempo por la cabeza, que era escribir sobre mi experiencia como madre, y compartir todas las cosas que estoy aprendiendo de la mano de mi hija.

Siempre he estado tan comprometida con mi desarrollo profesional, que soy una de esas mujeres que han retrasado la maternidad casi hasta el límite, y que sin embargo, cuando ésta ha llegado, me ha sorprendido tanto y tan gratamente, que me parece una maravilla que nunca me hubiese podido imaginar de no haber tenido la experiencia.



¿QUÉ SIGNIFICA ANANANADOS?

Es un juego de palabras que surgió de anonadados y nana. Tantas horas cantando nanas para conseguir que se durmiese nuestro ranín,... que casi es un tributo obligado. Ananas, además, significa piña en alemán, así que podríamos interpretarlo también como apiñados, que es una de las consecuencias directas cada vez que se tiene un hijo, que te apiñas como puedes (si, como es habitual, no te puedes cambiar a una casa mayor).



¿SOBRE QUÉ VOY A ESCRIBIR EN ANANANADOS? 

Pues de todo lo que he ido experimentando y conociendo a raíz de ser mamá, desde el embarazo hasta la crianza: bebés y niños, las dificultades y dudas que me he encontrado, cómo las he resuelto, las cosas que me hubiese gustado conocer en su momento, los consejos que recibí o no recibí (y creo que podrían ayudar a otros papás y mamás), ideas para hacer con los niños, recomendaciones de libros, canciones, recetas, productos útiles (y los que no lo son tanto)...

También quisiera compartir con vosotros algunos de los dibujos y manualidades que hago con y para mis niñas, y conocer vuestras opiniones, experiencias y consejos, porque no hay verdades absolutas, ni nunca se sabe todo sobre nada.

La vida es un proceso de aprendizaje continuo, y quien crea que ya no tiene nada más que aprender en la vida, ha empezado a morir.

Quiero crear un espacio para intercambiar experiencias, anécdotas, consejos,... y que todos vayamos creciendo poco a poco de la mano de nuestros hijos, pero no lo puedo hacer sola, os necesito ;)


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